Facultad de Filosofía y Humanidades celebra los 40 años de trabajo de dos de sus funcionarios

Este miércoles, cuando la Universidad Austral de Chile conmemora su Sexagésimo Octavo Aniversario, la Facultad de Filosofía y Humanidades celebra el reconocimiento de la trayectoria de dos de sus funcionarios. Se trata de la secretaria del Centro de Idiomas, Patria Castro y el auxiliar de servicios del Instituto de Historia y Ciencias Sociales, Jorge Matus, quienes cumplen 40 años en la institución.

Vale mencionar que, este reconocimiento al personal de administración y servicios de la UACh se implementó a partir de 2019 y forma parte del Contrato Colectivo suscrito con el Sindicato Nacional N°1 de Trabajadores de la Universidad Austral de Chile.

Sobre este hito el Decano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Dr. Mauricio Mancilla, valoró el trabajo y compromiso de los funcionarios destacados.  

“Quisiera expresar mi profundo agradecimiento y reconocimiento, en nombre de la Facultad, a Patricia y Jorge por su compromiso y dedicación durante estas cuatro décadas al servicio de nuestra Universidad. Con su labor han contribuido a forjar la identidad de la Facultad, que es el sello de nuestros funcionarios y que se caracteriza por el trabajo colaborativo y solidario”.

Patricia Soledad Castro Pérez, 62 años, madre de la profesora en lenguaje y comunicación, Pamela Flández. Luego de haber estudiado secretariado en el Instituto Sandrock de Valdivia, en agosto del año 1982, se incorpora como secretaria al Programa de Regularización de Títulos de Enseñanza Básica, de la Facultad de Filosofía y Humanidades. En 1995 se integra al Centro de Idiomas, lugar donde se desempeña en la actualidad.

“La Universidad Austral de Chile es mi segunda casa, paso gran parte del día aquí y disfruto mucho compartir con mis colegas, los profesores y estudiantes. Siempre me he llevado bien con mis colegas porque tengo una personalidad muy alegre y sociable, pero también muy responsable en mi trabajo. La universidad me ha dado mucho, permitió darme estabilidad económica y también formó a mi hija como profesora, siempre estaré agradecida por todo lo que esta institución me ha permitido lograr. En el 2025 se termina mi paso por la universidad porque jubilaré, me encantaría quedarme un poco más, pero creo que es importante privilegiar mi salud”, indicó.

Jorge Enrique Matus Rojas, 62 años, padre de cuatro hijos, y abuelo de cuatro nietos, tiene estudios técnicos en electricidad en el Liceo Industrial de Valdivia.

Se incorporó a la Universidad Austral de Chile trabajando en el Programa de Regularización de Títulos de Enseñanza Básica en abril del año 1982. Trabajó por cerca de 35 años en el actual Centro de Formación Continua, hoy en día se desempeña como auxiliar de servicios del Instituto de Historia y Ciencias Sociales de la Facultad de Filosofía y Humanidades.

“Estoy a un año de jubilar y me siento muy contento de pertenecer por tantos años a la Universidad Austral, aquí aprendí a relacionarme con personas totalmente distintas a mí. He conocido a muchos estudiantes, profesores, y académicos, y estoy de haber tenido grandes amigos en esta institución, me queda poco aquí pero estoy feliz de todo lo que me ha pasado en la Universidad”.

Dr. Gustavo Blanco es promovido a categoría titular en el 68° aniversario de la UACh

Oriundo de la ciudad de Rancagua, el Dr. Gustavo Blanco, llega a la Universidad Austral de Chile como estudiante de Agronomía en el año 1990, donde inició sus trabajos e investigaciones de pregrado en desarrollo social rural. Es en esa búsqueda donde se incorporó a un equipo de trabajo liderado por el profesor del otrora Instituto de Ciencias Sociales, Carlos Amtmann, y comenzó a orientar su interés hacia las líneas de investigación sobre estudios sociales de ciencia y tecnología, medioambiente y desarrollo, políticas de desarrollo rural y estudios territoriales y regionales.

Es académico y actual director del Instituto de Historia y Ciencias Sociales, también es el actual presidente del directorio del Centro de Humedales Río Cruces, y ha sido director del Magíster en Desarrollo Rural que comprende a la Facultad de Filosofía y Humanidades y Facultad de Ciencias Agrarias y Almentarias UACh.

En ese contexto, el Decano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Dr. Mauricio Mancilla destacó la trayectoria y el compromiso con la búsqueda del desarrollo sustentable del académico.

“La condición de profesor titular es la categoría más alta a la que aspiran las y los docentes de la universidad como reconocimiento a su trayectoria académica. A lo largo de su carrera el profesor Gustavo Blanco ha desarrollado un trabajo de excelencia y calidad a través de su participación en programas de investigación interdisciplinarios, ampliando y diversificando la senda abierta por el área de sociología de nuestra Facultad, siempre en sintonía con la búsqueda de un desarrollo sustentable que pueda hacerse cargo de la crisis medioambiental”, puntualizó el Decano.

Sobre su ascenso a categoría titular, el Dr. Blanco expresó, “Creo que ser promovido a la categoría titular es un reconocimiento al trabajo realizado, por cierto, se agradece, pero también es importante reconocer que detrás de esta promoción existe mucho trabajo y una carga invisible para muchos. Es parte de un camino, para mí no es como llegar a una cima, creo que es el inicio de un nuevo proceso que tiene otras obligaciones y desafíos personales y profesionales, me siento con ganas de seguir haciendo cosas por la Universidad, por los estudiantes y las agendas de trabajo, investigación y docencia que tenemos”, señaló.

Así mismo, agradeció la confianza expresada por los directivos y académicos quienes le han dado la posibilidad de desarrollar roles de gestión.

“Agradezco la confianza, las oportunidades y voluntades que la Universidad y mis colegas me han ofrecido para poder integrarme a equipos de trabajo colaborativo, para mí ha sido altamente gratificante y enriquecedor. De igual modo, estoy agradecido de poder acompañar por muchos años el proceso de la creación del Centro de Humedales Río Cruces, donde me ha tocado trabajar en conjunto con actores del sector público y sociedad civil”, explicó.

Sobre su vínculo con la Universidad y la ciudad, el académico puso en valor la calidad de vida que se logra en este entorno. “Tuve la posibilidad de venir a Valdivia cuando niño y la recordaba como una ciudad hermosa; ya estudiando aquí me fui enamorando del paisaje, la vida alrededor de la universidad, la vida social que hay en torno al campus me parece un entorno muy especial. Me cuesta imaginarme fuera de Valdivia, es muy atractivo la doble relación que se obtiene entre el alma máter y Valdivia, como un lugar que permite tener un buen vivir”.

En ese contexto, el Dr. Blanco manifestó: “La Universidad Austral de Chile es como la extensión de mi hogar, me ha permitido no solo formarme como profesional e investigador, sino crecer en términos de desarrollo personal. Es el espacio que, cotidianamente, me permite tener una gran cantidad relaciones personales y humanas y sin duda, es muy gratificante”, indicó.

Sobre los nuevos procesos que vive nuestra casa de estudios y la proyección en el tiempo, el Dr. Gustavo Blanco, destacó la responsabilidad de los miembros de la comunidad universitaria a la hora de modernizar las estructuras y hacerlas más democráticas y participativas. “A la Universidad Austral de Chile le tengo mucho cariño como institución, pero creo que uno no debe de ser complaciente, es importante mencionar que, la Universidad desde hace un tiempo está pasando por un proceso de cambio, que está siendo empujado por los estudiantes, académicos y funcionarios, y creo que para los que llevamos más tiempo tiene que ser una obligación ayudar a encauzar esos cambios para tomar nuevos rumbos en cuanto a participación, democratización y gestión universitaria. Me refiero a modernizar sus procesos e impulsar una renovación en su vocación social hacia los territorios. Si bien eso lo ha hecho la Universidad, está claro que estamos en un momento histórico en que necesitamos repensar cómo podemos transformarla para hacer de ésta, una mejor Universidad”, puntualizó.

Dra. Ana Traverso es promovida a categoría titular en el 68° aniversario de la UACh

Este año 2022 la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad Austral de Chile celebra la promoción a titularidad de dos de sus académicos, se trata de la Dra. Ana Traverso del Instituto de Lingüística y Literatura, y el Dr. Gustavo Blanco del Instituto de Historia y Ciencias Sociales.

La Dra. Ana Traverso se incorporó en el año 2002 como docente del Instituto de Lingüística y Literatura. Dentro de su carrera ha sido autoría de un sinnúmero de publicaciones y ha integrado diversas investigaciones y proyectos en las áreas de  poesía, narrativa y literatura de mujeres.

Formó parte del Equipo de Decanatura de la Facultad de Filosofía y Humanidades como Secretaria Académica y Coordinadora de Extensión. Actualmente es directora de la Revista de Estudios Filológicos de la Facultad de Filosofía y Humanidades y Consejera Académica de la Universidad Austral de Chile. 

El Decano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Dr. Mauricio Mancilla, destacó la trayectoria de la académica quién también  cumplió dos décadas como miembro de la institución.  

“Para nuestra Facultad es una gran alegría la promoción académica de la Dra. Ana Traverso, quien, en los 20 años que lleva desempeñándose en nuestra Universidad, ha tenido un alto compromiso en docencia de pre y postgrado, investigación, vinculación con el medio y gestión universitaria, a través del ejercicio de varios cargos a nivel de Facultad y una activa participación en comisiones institucionales, destacándose en los últimos años como representante en el Consejo Académico”.

Del mismo modo, el Decano mencionó “Alcanzar la condición de profesora titular es un claro reconocimiento a su trayectoria y aporte en el ámbito de las letras, fruto del desarrollo de una obra original y sustantiva en el estudio de la literatura chilena, especialmente visibilizando la voz de escritoras mujeres. Sus investigaciones y publicaciones han contribuido a modificar el canon de la literatura chilena contemporánea”, indicó.

Sobre este logro importante en su carrera académica, la docente del Instituto de Lingüística y Literatura mencionó, “creo que es positivo que más mujeres accedan a la titularidad y tengan más oportunidades en cargos de gestión, para poder visibilizar el trabajo de las mujeres en la universidad, ya sea en cargos de representación o integrando equipos de trabajo normalmente masculinizados. En los últimos años se ha estado incorporando la paridad en la gestión universitaria y llegar a la titularidad contribuye que nos sumemos a otros espacios, y podamos aportar mucho más, a través de la flexibilidad que entrega esta categoría”.

En ese contexto, la académica se refirió a la participación femenina en espacios de toma de decisión dentro de la corporación, agregando que, en los últimos años, la Universidad ha avanzado en términos de paridad, “si bien, las mujeres, somos minoría en el Consejo Académico, creo que se ha avanzado, sobre todo abriendo espacios e integrando la paridad al discurso y al lenguaje en estos ámbitos que han sido siempre masculinos”.

Sobre la titularidad, la Dra. Ana Traverso reflexionó sobre lo necesario que es tener una visión global de la gestión y quehacer universitario al alcanzar la máxima categoría académica.

“La noción tradicional de un profesor titular es su manejo y conocimiento en todos los ámbitos que engloba la carrera académica como la docencia, investigación, la vinculación con el medio y gestión universitaria. Pero creo que sería importante incluir reconocimientos similares en la carrera docente y en la profesional, por ejemplo”.

Finalmente, la académica expresó su visión sobre la investidura de profesores titulares y la ceremonia de aniversario. “Si bien estoy contenta de poder participar de esta celebración de aniversario, en donde además se reconocen los años de servicio de docentes y funcionarios, considero que los tiempos han cambiado y la Universidad debiese replantearse algunos rituales, tales como el desfile de togados. Me parece que, tanto el desfile como la postura de la toga y el birrete, han perdido su significado original, transformándose en actos elitistas que se alejan de espacios simbólicos de representación democrática y participativa, que podrían encarnar más adecuadamente a la comunidad universitaria”.

En Cine Club se conmemoraron 50 años de autonomía de la UACh

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El 31 de mayo de 1968, con el entonces Rector Félix Martínez Bonati, el presidente Eduardo Frei Montalva visitaba la Institución para firmar el decreto que a comienzos de junio del mismo año declaraba autónoma a la Universidad Austral de Chile para establecer, con total independencia, sus planes y programas de estudio, así como la potestad de otorgar títulos académicos y profesionales.

Organizado por la Facultad de Filosofía y Humanidades, esta celebración se realizó para rememorar el segundo hito más relevante en la vida de la UACh, tras su fundación.

En palabras del Rector, Dr. Óscar Galindo Villarroel, el cincuentenario de la promulgación de la ley que le dio la autonomía a la Universidad es trascendental para su historia pues le significó la adquisición de un nuevo rol en el escenario de la Educación Superior antes de la reforma de 1981.

La UACh nació inicialmente asociada a la Universidad de Chile, por ello todos nuestros egresados de las promociones anteriores a junio de 1968 tienen títulos profesionales de dicha casa de estudios. De hecho, cada vez que lo solicitan a dichos estudiantes se les entrega el título de nuestra Universidad”, enfatizó la autoridad.

En el discurso proclamado en mayo de 1968, el Rector Félix Martínez Bonati destacaba que la historia y el carácter de esta Universidad la singularizan entre sus congéneres chilenas, pues ha sido sustentada, en su quehacer cotidiano y en su proyección institucional, tan solo por sus propios profesores, su personal y sus estudiantes, y por una egregia minoría de ciudadanos fundadores, a quienes ha concitado únicamente el afecto y la voluntad de esta empresa cultural.

El Decano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Dr. Mauricio Mancilla Muñoz, reconoce que este evento surge del ímpetu y de la inagotable memoria del profesor del Instituto de Historia y Ciencias Sociales, Ricardo Molina Verdejo. Para la ocasión, se preparó un facsímil con el discurso pronunciado por el Rector Martínez Bonati, documento que se repartió entre los asistentes a la ceremonia.

El Dr. Mancilla señaló que “esta fecha se trata de un hito que devela la consolidación de la Universidad, una suerte de certificado de mayoría de edad, que releja el acelerado y mancomunado trabajo efectuado por esta comunidad universitaria en sus primeros años de creación. Pero también, la conmemoración de esta fecha nos impone un ethos al cual no debemos renunciar en pos de defender y asegurar la autonomía de la Universidad. Junto a la irrenunciable libertad para sus académicos y estudiantes en una época cargada de demandas por igualdad, tiempos que se repiten hoy y que nos invitan a prestar atención en las nuevas generaciones”.

El profesor Ricardo Molina Verdejo prologó y comentó el texto preparado por el Dr. Fabián Almonacid, quien no pudo estar presente en la ocasión, ofreciendo un contexto histórico del año 1968 en Chile y el mundo, escenario particular y especial para las reformas que se sucedieron.

El trabajo del Dr. Almonacid centró su atención en los detalles del proceso y de la discusión parlamentaria en torno al tema de la autonomía de la UACh destacando el rol de los diputados demócrata cristianos Eduardo Koenig, Alberto Daiber y Narciso Irureta, quienes el 7 de septiembre de 1966 presentaron una moción en la Cámara de Diputados. Sin embargo, la autonomía, que debía ser aprobada por ley, no se obtuvo en ese período y terminaron enrareciéndose las relaciones al interior de la comunidad, entre quienes creían, como el Rector Martínez Bonati, que era imperiosa tenerla, y los consideraban en cierto modo favorable contar con el respaldo y la tutela de la Chile.

El Dr. Almonacid destacó entonces que finalmente el 31 de mayo, en este mismo Teatro Universitario, el Presidente de la república, Eduardo Frei, y el Ministro de Educación, Máximo Pacheco, firmaron el decreto de promulgación de la ley de autonomía, ante otros ministros, parlamentarios y autoridades. Instancia en la que Martínez Bonati aprovechó para señalarle al gobierno el centralismo del Estados y escaso apoyo a las Universidades de regiones. Finaliza sus palabras enfatizando que extrañamente, después de cincuenta años casi no han cambiado mucho los términos de cualquier discusión universitaria relevante. Las grandes preguntas surgidas durante la reforma universitaria han permanecido vigentes aunque congeladas en el tiempo, esperando ser reasumidas como uno de los grandes desafíos de la comunidad universitaria.