Facultad de Filosofía y Humanidades lamenta el reciente deceso del narrador, creador, teatrista y gestor cultural Pedro Guillermo Jara

Jara fue fundador, editor, Director de la revista de bolsillo “Caballo de Proa” y cuenta con la publicación de más de 20 obras en múltiples formatos, muchos de ellos no convencionales, como fue el caso de su popular libro-objeto “Kasaka”, que generó múltiples reacciones por parte de la comunidad

Utilizó diversas fórmulas creativas para motivar a la lectura y materializar su escritura; trabajó además como monitor de fomento lector en diversos establecimientos educacionales municipalizados de la región de Los Ríos. Destacó además el trabajo en conjunto con su amigo, Ricardo Mendoza, de Ediciones Kultrún, con quien publicó cerca de 10 obras desde el año 1988.

Su trabajo y tenacidad creativa lo llevaron a recibir en el año 2017 el premio en la categoría Artista/Cultor Regional de Trayectoria, otorgado por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, destinado a reconocer la obra continua en el tiempo y aporte trascendente a la cultura regional y al desarrollo de diversos campos y áreas del saber y de las artes.

Recientemente, publicó su antología personal “El Sendero de la Mariposa” y se adjudicó el Fondo Comunal de Proyectos Culturales Conarte 2018, con “Vuelta de Tuerca”.

“Pedro Guillermo Jara fue un entrañable e incondicional colaborador de la Facultad de Filosofía y Humanidades. Desde sus tempranos años como estudiante participó en la organización de actividades culturales y en la publicación de revistas literarias. Todos recordaremos su cuidadosa y tenaz edición de la revista de bolsillo Caballo de Proa, dedicada al arte, la cultura, el medio ambiente y la sociedad. En 2006 fue parte del equipo que dio vida al programa radial de nuestra Facultad, Corriente Alterna –que hasta el día de hoy se transmite por Radio UACh–, donde semanalmente se ha logrado establecer un puente entre la Universidad y la comunidad valdiviana”, mencionó el Decano de la Facultad de Filosofía y Humanidades Dr. Mauricio Mancilla.

Asimismo, el Decano expresó sus más sinceras condolencias a quien fuera su compañera de vida Maha Vial y a su hija Paz Jara. “Lamentamos profundamente la partida de Pedro, pero estamos convencidos que su legado literario vivirá entre quienes tuvimos el placer de disfrutar de su inteligente conversación y punzante sentido del humor. Agradecemos sus aportes al quehacer académico y formativo la de nuestra Facultad, valoramos su amistad, gran capacidad creativa y perseverancia infinita”, puntualizó.

“con la lectura logras otra visión del mundo que enriquece tu visión. Tienes más herramientas frente al poder, frente a la manipulación, a que no te engañen. Te permite estar más atento al mundo, a que no te hagan trampa, a ir más aperado; con tu visión más rica, más enriquecida”. Pedro Guillermo Jara (Q.E.P.D)

Testimonios

Pedro decidió ser escritor. Y escribió. Pese a los fracasos, a la desesperanza, al desprecio, a la dictadura, a la incomprensión, al hambre. Escribió, montó en su Caballo de proa y pedaleando, pedaleando, llevó la Poesía de su breve prosa por los barrios y las escuelas, los encuentros de escritores y la academia. Nos dejó esos diminutos seres entrañables de su museo de papel, pero también de carne y hueso, para que viéramos el mundo con compasión y amor. Para siempre distinto, como si una bala de papel nos hubiese acariciado el corazón. Y así fue como se quedó por siempre con nosotros.  (Dr. Roberto Matamala, docente del Instituto de Lingüística y Literatura, UACh)

Ayer, al llegar a Valdivia, supe que había fallecido Pedro Guillermo Jara. Ante estas noticias uno no sabe qué decir. El 7 de diciembre estuvo esperándome después de una clase. Recuerdo la fecha porque me entregó El sendero de la Mariposa (Antología personal), recientemente publicado por Kultrún, con una dedicatoria que cierra con la fecha. Conversamos sobre su proyecto de lectura de narradores en un tren y la idea de entregarme sus mini cuentos incluidos en una caja de telegramas. En la tarde escuché la retransmisión del programa de radio de Cristina Gallardo, donde Jara hablaba de Chile Chico, su padre telegrafista y leía sus historias sobre ese paraíso en el sur, más allá de Aysén, que se asemejaba a una utopía anterior al golpe de estado. La voz se alberga en la radio como otro tiempo y espacio. Patagonia Blues, decía, se transformó para mí en un estado de ánimo. Creo que la brevedad de los relatos y personalidad de Pedro Guillermo Jara entregaba esa impronta de una ucronía o, quizás, heterotopía: “A través del desnudo cerezo observo el planeta marte; a través del dióxido de carbono, del nitrógeno y del argón observo al planeta tierra”, leo en Miradas, el telegrama que me pasó cuando recién llegué a Valdivia. “Todos hemos nacido en Lisboa, pero nunca hemos regresado”, dice en otro de la misma cartilla. Escribo este mensaje como un telegrama de las conversaciones inconclusas; todos hemos nacido de algún modo en Chile Chico, Pedro, y quizás nunca regresaremos. (Dr. Jorge Polanco, docente del Instituto de Filosofía, UACh)

Una piedra empecinada. Una piedra de papel, pero de otro modo. Desde que nos conocimos, hace años, fue siempre la misma sensación, el mismo tono, el mismo envío: nadie hace o escribe solo, nadie solo. Eras varios, con Maha y los amigos. Desde la Plaza de la República vigilada a los rincones de la burocracia que nos consume, tanteando la existencia. Desde los rollos a las postales, te desperdigas en cuántos ínfimos caballos. Y así, siempre tener la impresión de vislumbrarte escribiendo, conversando, por ahí, a tu propio ritmo, ritmo de mariposa, de blues, fumando un cigarrillo bajo estas lluvias. Ritmo de ese diálogo a la intemperie que no queremos cerrar. Y así siempre, fumándonos los cigarrillos contigo bajo estas aguas, seguimos. Seguiremos. Contigo. (Pedro Araya, Oficina de Publicaciones Facultad de Filosofía y Humanidades UACh)

En homenaje a mi querido amigo Pedro Jara Puentes, escritor de la escritura que resplandece risueña, juguetona, teatral —y verdadera por eso mismo—, fallecido el 2 de enero de 2019, en Valdivia, Chile.

ESCRIBIR ES LO MÁS APARTADO DEL ÉXITO MUNDANO

(Tu Fu)

No sé si tenemos talento. Ningún crítico

nos consideraría, en vida, los poetas principales

de nuestra época. Menos ahora, cuando la poesía

ha sido tasada a precio ridículo

por los ingenieros del mercado.

Nuestro hogar es humilde y nuestra fama, si la tenemos,

es trivial. ¿A quién le importamos?

A nadie que no sea también de los nuestros.

Somos nuestro propio público. Y los árboles del bosque

y los guijarros del camino nos miran indiferentes

mientras envejecemos a pasos agigantados

delante de los espejos rotos.

No sé si tenemos méritos literarios

y no sé si nuestros poemas pervivirán

junto con los de los grandes poetas muertos.

Sólo sé que sangran las estrellas cuando nadie las mira,

y el rocío reclama en silencio contra la escarcha

porque él también quiere ser nube de primavera.

Al menos tenemos motivos para ser fieles

a la luz y a la oscuridad

que hemos amado desde antes de nacer,

porque nos gusta soñar con caminos

que no conducen a parte alguna.

Somos, pues, como gaviotas que sólo atinan

a volar a ciegas, embelesadas, entre el cielo y la tierra.

(Dr. Sergio Mancilla, docente del Instituto de Lingüística y Literatura, UACh)

Extracto de la reseña “La bala que acaricia el corazón” (2010) de Pedro Guillermo Jara, escrita por la Dra. Claudia Rodríguez, docente del Instituto de Lingüística y Literatura, UACh

Pedro Guillermo Jara conjuga en este texto tres dimensiones literarias que siempre le han interesado: la reflexión teórica respecto a la micro narrativa (microcuento, cuento, crónicas en versículos y ahora nanonovela); la novela negra o relato policial; y la innovación en sus soportes o como hemos llamado, una propuesta de formatos excéntricos.

La nanonovela es el género propuesto por Pedro Jara (que se asemeja a las nociones de novela petit, micronovela, cápsula de novela, nouvelle) y es una apuesta, alejada del ropaje literario, por la miniaturización y condensación de los componentes narrativos. Fuera de todo ripio queda  lo indispensable, lo mínimo.

Esta nanonovela tiene estructura de puzzle; está compuesta por 18 capítulos, cada uno de menos de una página, que constituyen verdaderos microcuentos, a su vez interrelacionados. Para ello utiliza el autor estrategias como la circularidad, la alternancia, la completud. Los personajes apenas esbozados en un capítulo, se completan en los siguientes, y el lector atento a esas pistas va atando cabos y descubriendo, por ejemplo, las distintas relaciones parentales.

El autor textual de esta nonanovela nos recuerda al detective privado Peter William O’ Hara , alter ego del autor real; por el alto conocimiento de la jerga policíaca, los códigos del narcotráfico (como el bebé, la muchacha, la mexicana); sus características de observador y su pasión por la crónica roja. Este género trabajado latamente por Pedro Jara, es propio de la ‘Nueva Narrativa Chilena’ en tanto es una posibilidad de tematizar la realidad social y política del país, una atmósfera asfixiante, donde prima la violencia, la falta de justicia, la corrupción del poder y la inseguridad y que dan cuenta de una sociedad en crisis.

Pedro Guillermo Jara: Publicaciones y gestión cultural

Publicó Historias de Alicia la uruguaya que llegó un día (autoedición, Valdivia, 1979); Para Murales (El Kultrún, Valdivia, 1988); Plaza de la República, (El Kultrún, Valdivia, 1990); Disparos sobre Valdivia (El Kultrún, Valdivia, 1997; De cómo vivimos con Jesse James en Chile Chico (Autoedición, Valdivia, 2002); Relatos in Blues & Otros Cuentos (Puerto Montt, 2002); Minimales, Tres obras de Teatro Breve, (Conarte, Valdivia, 2003); El Rollo de Chile Chico, (Conarte, Valdivia, 2004), Cuentos Tamaño Postal, (El Kultrún, Conarte, Valdivia, 2005); De Trámite Breve, (Edición Caballo de Proa, Valdivia, 2006); El Korto Cirkuito (Afiche-literario), Autoedición, Valdivia, 2008; Tres disparos sobre Valdivia, de Peter William O’Hara (Colección Ïnsula Barataria, El Kultrún / Consejo Regional de la Cultura y las Artes Región de los Ríos, Valdivia, 2009; La bala que acaricia el corazón, Nanonovela (Colección Ïnsula Barataria, El Kultrún / Conarte, Valdivia, 2010; Kasaka, Autoedición, FNDR Región de los Ríos-CCM Valdivia, Valdivia 2011.

Antologado en: Brevísima Relación del Cuento Breve de Chile, de Juan Armando Epple, Ed. Lar, Santiago, 1989; Cien microcuentos chilenos, Juan Armando Epple, Editorial Cuarto Propio, Santiago, Chile, 2002; Andar con Cuentos, Nueva Narrativa chilena, de Diego Muñoz Valenzuela y Ramón Díaz Eterovic, Mosquito Editores, Santiago, 1992; Héroes Civiles & Santos Laicos, de Yanko González-Cangas, Barba de Palo Ediciones, Valdivia 1999; Cien Microcuentos chilenos, de Juan Armando Epple, Cuarto Propio, Santiago, 2002; Al Sur de la Palabra, Letras de Chile (Mosquito Comunicaciones, Santiago, 2005); Letras Rojas, Cuentos negros y policíacos, Ramón Díaz Eterovic, compilador (LOM Ediciones, Santiago, 2009); Arden Andes, Antología de microficciones Argentinochilenas, Selección y prólogo de Sandra Bianchi, Macedonia Ediciones, Buenos Aires, Argentina, 2010; ¡Basta! + de 100 hombres contra la violencia de género, Ediciones Asterión, Santiago, Chile, 2012.

En 1998 obtiene la Beca del Consejo Nacional del Libro y la Lectura. El 2003 la Pasantía para Escritores Profesionales del Consejo Nacional del Libro y la Lectura, para terminar de escribir el libro-objeto El Rollo de Chile Chico y el 2006 obtiene el premio Crónicas Regionales por su libro Patagonia Blues, del Consejo Nacional del Libro y la Lectura. En 2011 obtiene la Beca de creación literaria del Consejo Nacional del Libro y la Lectura.

En 2016 participó como invitado, jurado, panelista y lector de su obra en el “IX Congreso Internacional de Minificción”, organizado por la Facultad de Humanidades de la Universidad del Comahue, Argentina. En el año 2017 el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes de Los Ríos, le otorgó el premio en la categoría Artista/Cultor Regional de Trayectoria.

Entre 2013 y 2017 fue monitor de literatura creativa en diversos establecimientos educacionales municipales de la Región de los Ríos. En 2018 publicó su antología personal “El Sendero de la Mariposa” y se adjudicó el Fondo Comunal de Proyectos Culturales Conarte 2018, con “Vuelta de Tuerca”.