Estas jornadas buscan abrir espacios de reflexión crítica y actualización pedagógica para abordar los desafíos actuales de la enseñanza universitaria.
Hace unas semanas, en la Sala Jorge Bárcena, se dio inicio a las Jornadas de Reflexión Docente 2025, un espacio que este año fue proyectado como un ciclo de capacitaciones a desarrollarse durante el segundo semestre. La jornada inaugural contó con la participación de la profesora Camila Alcaíno Monsalves, quien abordó la temática “Inteligencia Artificial para la actividad académica y docente”.
La instancia se dividió en dos talleres complementarios. El primero, realizado el 16 de junio bajo el título “El presente de la IA: implicancias para la docencia y la academia”, tuvo un enfoque teórico orientado a contextualizar el desarrollo actual de la inteligencia artificial, abordando sus definiciones oficiales, antecedentes históricos clave y su impacto en la educación superior. Durante esta sesión, se discutieron temas como los modelos de aprendizaje automático, el uso responsable de la IA y las tensiones entre su integración y restricción en el aula. La reflexión colectiva puso énfasis en la necesidad de establecer principios rectores institucionales sobre el uso ético de estas tecnologías.
El segundo taller, titulado “Manos a la obra: taller de aplicación práctica de IA”, se llevó a cabo el 23 de junio y se centró en el uso aplicado de herramientas como ChatGPT, SciSpace y Elicit. En esta ocasión, las y los participantes aprendieron a redactar prompts efectivos, explorar literatura científica asistida por IA, organizar procesos investigativos y evaluar críticamente los alcances y limitaciones de estas herramientas en entornos educativos. La jornada promovió el uso autónomo, ético y estratégico de la inteligencia artificial como recurso docente.
El profesor Yerko Monje, Director de Docencia de la Facultad de Filosofía y Humanidades, destacó la relevancia de estas actividades:
“Estas jornadas marcaron el comienzo de las actividades programadas para este año, cuyo objetivo es generar espacios de reflexión docente sobre metodologías, innovación y el intercambio de experiencias. En este caso, iniciamos con dos sesiones sobre inteligencia artificial para herramientas de trabajo docente e investigativo que fueron de mucho provecho”.
Por su parte, la profesora y candidata a Doctora en Comunicación de la UACh – UFRO, Camila Alcaíno valoró la instancia como un espacio necesario para las universidades:
“Reflexionar sobre el uso de la inteligencia artificial en entornos universitarios ya no es una opción, sino una necesidad urgente para todas las instituciones de educación superior. Este tipo de espacios no solo fortalecen el diálogo académico, sino que también nos invitan a pensar críticamente cómo estas tecnologías —insertas en complejas redes sociotécnicas— están transformando nuestras prácticas cotidianas. Participar en esta apertura también me motiva a seguir investigando y compartiendo conocimiento sobre un fenómeno que, sin duda, seguirá reconfigurando nuestras formas de aprender, enseñar y comunicarnos”.
Las Jornadas de Reflexión Docente 2025 continuarán desarrollándose durante el segundo semestre, abordando temáticas vinculadas a innovación educativa, metodologías activas y transformación digital en la enseñanza.