Por segundo año consecutivo, y gracias al apoyo del Fondo de Proyecto para la Innovación en Docencia Universitaria – DACIC de la Universidad Austral de Chile, se desarrolló el proyecto “Tutoría de pares y diseño de una aplicación para el pensamiento crítico: Estrategias para un aprendizaje autorregulado y comprometido”, dirigido por la Prof. Patricia Thibaut, con la colaboración de los profesores Sebastián Hurtado, Andrea Lizasoain, Yerko Monje, y Cristian Olivares.
Al alero del curso “Ética, relacionalidad y desarrollo humano” impartido por la cerreras de Pedagogía en Historia y Ciencias Sociales y dirigido por la docente, Patricia Thibaut, este proyecto fomentó el desarrollo de estrategias de aprendizaje en torno al pensamiento crítico, profundizando esta vez en las dinámicas de aprendizaje autónomo y comprometido, ámbito primordial en el fortalecimiento de la educación inicial, por medio de un proceso de tutoría de pares, para estudiantes de primer año de la carrera.
Tras un proceso de postulación, se incorporaron como tutores los estudiantes de Pedagogía en Historia y Ciencias Sociales: Marisa Guichaquelén, Carolina Arriagada, Camila Sánchez, Monserratt Valdevenito, Tatiana Manque, Camila Neira, Matías Mansilla y Pablo Delgado. Se trabajó a partir de tutorías grupales durante todo el segundo semestre de 2020, finalizando con una ceremonia el pasado 27 de noviembre, en el cual los estudiantes reconocieron el aporte de sus pares, y se generó una retroalimentación en torno al programa.
Experiencias
En ese contexto, la estudiante de sexto semestre de la carrera, Monserratt Valdevenito, quien participó como tutora destacó la oportunidad ofrecida por el proyecto. “Poder participar como tutora en esta instancia fue una experiencia muy enriquecedora. Principalmente, para mí fue una experiencia muy grata debido a que pude conocer y crear lazos con mis compañeras y compañeros de primer año de una forma muy significativa, la relación a través del aprendizaje y los conocimientos permitían explorar diversas áreas de nuestras vidas, dando paso a un espacio sano para la conversación de nuestros gustos en común y sobre la vida universitaria en pandemia”, indicó.
Asimismo, expresó que, “ser tutora implicó tomar nuevas responsabilidades y poder desarrollar una nueva faceta dentro del continuo aprendizaje sobre la pedagogía. Sin duda que el trabajo en las tutorías me entregó nuevas herramientas académicas, sociales y pedagógicas, permitiéndome poder adentrarme de alguna forma en las actividades docentes desde una nueva perspectiva”.
Del mismo modo, Joel Coñuen, estudiante de primer año agradeció la experiencia. “mi experiencia con las tutorías fue espectacular, me siento muy agradecido de los tutores, particularmente de la tutora que se me fue asignada dentro de este proceso. Me ayudó a retroalimentar los textos del ramo, pero con una metodología didáctica en que nuestra tutora nos hizo participar en todo momento, obviamente esto no fue problema ni para mí ni para mis compañeros. Por otro lado, me sentí bastante cómodo contribuyendo en las tutorías, el ambiente generado fue muy agradable, y más en este contexto dónde las interacciones se dan a través de una pantalla, hasta me animé a encender mi cámara. La dedicación y el tiempo que nos brindaron nuestros compañeros de segundo año es de valorar, no cabe duda que serán unos grandes profesores el día de mañana”.
Finalmente, la profesora Patricia Thibaut, Directora del Proyecto destacó y valoró el compromiso de tutores y estudiantes, quienes contribuyeron en sacar adelante esta iniciativa a pesar del actual contexto no presencial surgido por la pandemia.
“Fue una instancia desafiante ya que dado el contexto en el cual se desarrolló el proyecto tuvimos que modificar el formato de las tutorías; no obstante, pudimos adaptarla y estoy muy orgullosa de la dedicación de los tutores y la recepción de los estudiantes del proyecto. Espero que las tutorías hayan contribuido a la formación de futuros profesionales autónomos, empáticos y comprometidos con su proceso de aprendizaje”, puntualizó.